Escapar

<b>Escapar</b>
El 27 de enero de 1979 tu sangre y la lluvia mojaron nuestra acera

17 abril 2008

Igual Da


Como diría aquel, sin ánimo de ser exhaustivo. Igual da que Zp proponga y firme el Pacto Antiterrorista, que lo traicione con Eguiguren y además tenga el desahogo de acusar de desleal al otro firmante. Que hay que tenerla de hormigón armado. Igual da decir atentado por un atentado terrorista, que accidente; para eso lo acordaron Zp y Ternera, el animal etarra. Igual da enviar a De Juana al hospital donostiarra porque está que dice que se muere, el metetripas sacamantecas de la Irati, que devolverlo al mako y ahí te jodas. Igual da acusar a Otegi y mandar a media Guardia Civil para ponerlo ante el juez, que retirar la acusación.

Igual da que España sea nación que no lo sea –que eso es discutible– con tal que albergue otras naciones tan imaginarias como indiscutibles –esas sí. Igual da que te mate un terrorista por tumbar el Estado de Derecho y la nación, que la palmes en una Guerra Civil con dos bandos contendientes. Si hombre, ¿no recuerdan a Zapatero explicando lo de su abuelo a Mª Jesús González, la madre de Irene Villa? Lástima que sólo los asistentes a aquella reunión monclovita vieran in situ el gesto despreciativo de Zapatero hacia Maria Jesús, cuando esta le respondió perpleja tras la inaudita comparanza presidencial. Igual da llamar trasvase al trasvase del Ebro a Barcelona, que llamarlo “aportación hídrica puntual”. Puntual... ¿será que llega al grifo de mi hermana en su casa de Vallcarca, matemáticamente a una hora previamente acordada? Y si no llega da igual, ya saben: igual da. Eso sí, a precio de oro. Igual da que la ministra de los ejércitos grite, de aquella manera, un viva el Rey en cursiva, que sueñe con una república, sin Borbón, claro, para su retoño. ¿O será retoña?

Y claro, lo veíamos venir. La vasta extensión de la taimada frivolidad zapateresca precisaba de alguna actuación. Don José Luis, en un ejercicio de responsabilidad política sin precedentes, como todo lo suyo, ha decidido ordenar semejante caudal de laxitud conceptual. No se ilusionen. No ha ordenado el consumo de plátanos para ir menos laxo al water closed, no. No ha inculcado algo de buen sentido a sus huestes, no. Al contrario, le ha dado por normalizar la cosa socialmente montando un ministerio más, el de la laxitud. Señoras y señores, con ustedes el Ministerio de Igual Da. Los ciudadanos entendieron mal aquello de la ministra venida de la promoción del cante. No se trata de un Ministerio de Igualdad, si no de Igual da. O de Da igual, que da lo mismo o igual, como quiera el lector. Da igual. Supongo que a la joven adquisición del consejo de ministros, doña Bibiana Aído, le dará igual dar el cante ¿ein?

En fin, reír por no llorar. Pero nada es inocuo ni atolondrado en Zp, no se engañen. Que la ministra nos perseguirá por escribir sin arrobas y por utilizar el género neutro del idioma castellano, sin sexarlo, vaya. ¿Ministra sexadora, será? Pero de la desigualdad entre españoles consagrada legalmente bajo la égida zapateril no contará nada. Quién nos iba a decir en aquellos años del destape, que el sexo terminaría ocultando desigualdades entre ciudadanos. No se lo imaginaban quienes cruzaban la frontera con Francia en busca de cine verdezuelo. Próximamente el Ministerio de la Piruleta. Ni George Orwell, oiga