Escapar

<b>Escapar</b>
El 27 de enero de 1979 tu sangre y la lluvia mojaron nuestra acera

30 abril 2009

Una canallada

Estos días ZP ha lanzado un obús dialéctico al cabeza de la lista pepera en las elecciones europeas, Jaime Mayor. Y hombre, que un político lance algún trasto a la cabeza de otro cada vez me parece peor. Y es que normalmente se trata de gilipolleces teatrales -trastos imposibles- escenificadas para la masa, sin calado político -con mayúsculas- y que ayudan inestimablemente a que el juego partidario se perciba hediondo. Hierve su descrédito entre la ciudadanía, tanto la despreocupada y perezosa como la de los cuatro gatos que aún echamos cuenta de lo que nos y se dicen los políticos, siquiera para persignarnos mientras nos encomendamos al Altísimo.


Pero lo dicho por ZP merece especial condena por lo abyecto del trastazo presidencial. Acusó al popular de no haber hecho nada en la lucha contra la Eta porque no les bailó el agua en su cambalache con la Eta. Sí, lo dice el del maldito "proceso" de cuya ignominia y ridículo aún andamos sin recuperarnos. Por ejemplo con los representantes proetarras de ANV pastando en el presupuesto a consecuencia del cálculo del ludópata político, que diría Anson. Y lo que costará recuperarnos del desastre. El menda, en tanto que víctima del terrorismo, empezó a respirar de otro modo con el gobierno que situó a Jaime Mayor de ministro de Interior. Además de su acertadísima gestión en Interior contra la Eta, hay que destacar que hasta entonces prácticamente todo fue abandono en el reconocimiento a las víctimas del terrorismo. Sí, aquellos años en los que durante buena parte de ellos ZP ejercía de mudo testigo -vulgo culiparlante- del abandono al que este puñetero país sometió a las víctimas del terrorismo. Y eso lo empezaron a remediar José María Aznar y Jaime Mayor. Es un hecho.

Así que en este tema Zapatero no presenta el más mínimo decoro y sigue parapetado tras los embustes del maldito "proceso". Conque Mayor no ha hecho nada en la lucha contra la Eta, dice el embustero... Puestos así, proclame ZP que las vacas vuelan. Seguro que don Pedro Castro desde la FEMP le habrá espetado un "tonto de los cojones".

Navarra y el sudoku

El amigo Aurelio Arteta insiste en que el sistema de concierto económico entre Navarra y el Estado no deja de ser un privilegio inadmisible en una nación de ciudadanos libres e iguales. Es difícil objetar frente a sus argumentos salvo desde la perspectiva histórica. Y claro, desde la diferencia histórica se torna complicado defenderse entre la moderna ciudadanía española. A mí me cuesta y tiendo a simpatizar con las tesis de Aurelio en este terreno, pero con precaución. En cualquier caso a estas alturas del descacharre nacional cualquiera va y le mete mano a este asunto. Como cuando uno tira de las cerezas en el frutero, va enganchado a otros cuya resolución supondría una auténtica revolución democrática en España.
Dicho esto, les contaré que esta tarde pensaba en el sudoku de la financiación autonómica. Este asunto quedó cerrado por unanimidad en 2002, pero el ludópata político que nos mal gobierna lo reabrió y andamos hoy a tortas. El caso es que pensaba yo con algún alivio que nuestro concierto económico con el Estado es un buen burladero en el que parapetar a Navarra, al menos mientras el toro de la crisis económica no salte la barrera y nos persiga por el callejón a fin de empitonarnos. Y he de confesarles que ese alivio pequeño me ha dejado un regusto como miserable. Que desgraciado país el nuestro.

26 abril 2009

Víctimas del terrorismo y política

En esta nuestra España, país que según don Manuel Martín Ferrand es desesperanzador con breves intervalos en los que brota la ilusión, este título provoca sarpullidos en alguna gente. Voy a hablar de un par de tipos sociales con actitudes perjudiciales para los intereses ciudadanos de las víctimas del terrorismo. No son los únicos, pero sí los que más llaman mi atención ahora mismo. Los definiré de cuatro brochazos y entienda la cosa el fino lector como un cuadro impresionista. No cabe duda de que luego la realidad aportará más matices, pero resulta indudablemente útil identificar a este par de familias en las que encontraremos a algunos de nuestros conocidos en mayor o menor grado de pertenencia.
Esto de mezclar víctimas del terrorismo y política… quita quita, piensan ambas familias. Sólo en la maldad y en el desconocimiento encuentro explicación a esta anomalía según la cual alguien niega el carácter ciudadano, así que político, a las víctimas del terrorismo. Los biempensantes, los del rechazo más o menos desmayado e irracional, los encuentra uno entre esos buenos vocacionales de la bondad estética. Salga corriendo el lector de las inmediaciones de una persona afanada en aparecer como buena; toda prevención resulta insuficiente. En muchos terrenos y en este de las ideas políticas no menos, no actúan y se pronuncian en función de su juicio racional y crítico hacia unas u otras, fruto del discernimiento. A menudo tratan de colar como pensamiento sano y ecuánime el mero cálculo de la distancia entre dos posiciones que les permita situarse en el centro estético. Este criterio meramente geográfico, tan falto de ética, tan detestable, sin embargo los sitúa a ojos de muchos en la bondad más pura y desinteresada. Así que estas personas no se ven impelidas por una conclusión destilada de su análisis moral y ciudadano a la hora de mojarse, de "no mojarse" en realidad, sino por un fino cálculo buenista que puede resultar muy despiadado. Tras la apariencia de una intención ecuánime y santurrona por ellos edificada, se esconde el sentido estético de autosalvación frente al juicio -también estético- de los demás. Por lo demás todo muy voluble en función de la coyuntura. Al cabo, gente egocéntrica y egoísta o simplemente débil, pero siempre acomodaticia, que no disputa por una idea en el espacio público y que te dejará tirado a la primera de cambio con una sonrisa en la boca… o ni eso.
A este grupo de ciudadanos hay que añadir el segundo grupo de peligro. El de quienes niegan abiertamente la rehabilitación de las víctimas del terrorismo en el espacio público. Sostienen la cosa esta de que las víctimas no deben estar politizadas. Administrémosles medicinas y vendas y andando: víctimas objeto de piedad, pero no sujetos de derecho. Algunos de los practicantes de este pensamiento (?) defienden que las víctimas aprecian las ayudas y el dinerito; que lo demás les trae sin cuidado. Y hombre las habrá, empezando por las poquitas que pregonan con gusto crematístico esta indecencia desde sus chiringuitos. Pero hombre, que pretendan hacer pasar el cuidado de sus intereses materiales como modelo de conducta ciudadana a seguir me parece perverso. Total, que entre unos y otros las reducen a "víctimas heridos" sin mayor trascendencia política. Accidentados. Además se sostiene que sufren una suerte de disminución psicológica y social, un trauma insuperable, por el que su legitimación ciudadana representa un peligro para los designios de los partidos políticos, monopolistas de la actividad política, que para eso les votamos. En fin, la política democrática reducida al partidismo y legitimada sólo en los partidos. Gran cáncer. La política democrática reducida a la adición de papeletas. Política y partidismo confundidos en una sola cosa -vieja trampa mortal de la ciudadanía en nuestra democracia- y claro, así se entiende que muchos estén por la memez de la no politización de las víctimas.
En contra de lo que se desprende de la prédica tóxica de ambos especímenes, las víctimas del terrorismo lo son de un proyecto político totalitario. En el caso de la Eta la destrucción de la nación española. Además muchas de ellas, fueron perseguidas, asesinadas, mutiladas y heridas… con nombre y dos apellidos porque decidieron ejercer su derecho a expresar ideas políticas, decidieron ser libres y con ello defender la libertad de todos. Es decir, que plantaron cara a los matarifes. Por tanto las víctimas tienen todo el derecho a intervenir en la vida ciudadana y política. Y en estas andamos aún. A veces resulta bastante tedioso tener que explicarlo a cada paso. Y sí amigos, me da la gana de estar muy politizado. Por ello ando más libre, que mis trabajos me va costando. Hartos años me ocultaron.

10 abril 2009

El pie en el estribo. Diario de Navarra 14.04.2009

En Navarra y la Comunidad Autónoma Vasca se han conformado acuerdos de gobernabilidad constitucionalistas. A muchos nos asaltan muchas dudas tras las veleidades del malhadado "proceso", pero es cierto que Navarra va para dos años de estabilidad que ya firmarían al otro lado de la muga de Lizarrusti. Cruzo los dedos deseando que la necesidad empuje a algunos políticos a la virtud, allí y aquí. Los políticos… Hace poco conversaba con uno de ellos a cuenta del cierre de mi etapa de delegado de la AVT. Una cosa llevó a otra y el hombre habló de algo sobre lo que suelo reflexionar: nuestros políticos se nos parecen, resultan un espejo de la sociedad. Buenos, malos y medianos. Otra cosa es quién indujo a quién, si fue antes el huevo o la gallina. Al cabo tal vez sean nosotros con poder. ¡Ostras! Y no crea el lector que pretendo salvar la cara a esos que, con distancia, llamamos "políticos". Los ciudadanos debemos controlarlos férreamente, pero con la piedad a la persona que nos aplicamos nosotros mismos.
Me explico con una anécdota. Acodados al fondo de la barra de un bar vociferaban cuatro clientes equipados con sendas cañas. Imposible seguir el hilo de lo que leía en mi periódico, cosa que admito llevar mal. Así que, a mi pesar, escuché las relaciones de aquella gente sobre los desastres de nuestro país y el solucionario cervecero que ellos aportaban. Un refugio común les procuraba armonía: todos los políticos son iguales e igualmente culpables, ¿les suena? Y hombre, si aquellos que tenían en tanta estima sus precarios "análisis" a pie de barra; si aquellos escandalosos que se entrometían a gritos en las seseras de quienes allí concurríamos parecían buenos tipos ¿por qué no admitir esos vislumbres en algunos de nuestros odiosos políticos que vienen a ser nosotros mismos con poder? Y en esa pregunta andaba con mi lectura ahogada sin remedio entre las voces del bar. Concluí que, siquiera por necesidad, bien podríamos llegar a la virtud en algún asunto político.
En 2007 muchos pensaban que el entendimiento entre el regionalista Sanz y el socialista Jiménez era coser un traje con hilván y que al primer agarrón perdería las mangas. El caso es que, no sé por cuánta necesidad y/o virtud, mantienen un paisaje con pinta de seguir. Queriendo pensar que no volverán las oscuras golondrinas del funesto "proceso" porque Zapatero ande vacunado, la esperanza quiere atraparme y me arrulla con sonrisas de López y Basagoiti. Será la necesidad. Mantener la esperanza, siquiera mortecina, es de lo más racional que uno ha hecho en la vida. Y si se equivoca ya veremos. Hasta cuando se es más pesimista alguien espera dentro. Y ese alguien casi desconocido y del que recelas por ingenuo… pues eres tú. Igual que la dicha nunca es completa, la desdicha tampoco lo es y hay que reparar en ello.
Así que pensando que este momento luce animoso a uno y otro lado del límite vasco navarro, me solazo mientras dure. Tal vez los efluvios provenientes del apretón de manos constitucionalista de la CAV sean benéficos aquí. Eso sí, siempre al tanto. Pero vaya, que en saliendo el sol como parece, me expongo un rato soñando con una epidemia de forzada cordura política que a las víctimas del terrorismo y a la entera ciudadanía nos procurara sosiego. Soñar es gratis y descansa mucho. Incluso aunque tengas el pie en el estribo mientras oteas el prometedor horizonte por encima de la grupa, pensando si está allí o si en realidad es un espejismo producido por el hastío. Ver venir, pues España no anda para pedirle mucho más que un milagro.

01 abril 2009

Libertad

Tras mucha oscuridad, uno fue recuperando la salud del alma comenzando los dosmiles. Culminé allá por 2003 recuperando la ciudadanía que se nos negó a las víctimas del terrorismo por décadas. Estos últimos años hasta hoy han sido de gran aprendizaje. Duele la vida, pero va enseñando. Como consecuencia de mi nacimiento ciudadano un día opté por añadirme a la rebelión cívica de la AVT -que aún ignorábamos estar impulsando- encabezada por la Junta presidida por Alcaraz. ¿Cuál fue el detonante último, esa gota de agua que colma tu vaso ya lleno? Pues se llama Vicente Ripa, el entonces Delegado del Gobierno en Navarra. Le saludé en un homenaje al Subteniente del Ejército Francisco Casanova, que fue asesinado por Eta en Berriozar. Al cabo de uno o dos días miraba yo el informativo de la televisión regional Canal 6 Navarra, donde volví a ver al mismo Delegado del Gobierno, pero esta vez en la sede del partido Aralar. Una rueda de prensa ofrecida en una sala de cuyas paredes aparecía colgada la banderola esa que reclama los presos -los asesinos de Casanova- a Euskalerria. El cámara enfocó aquel trapo y luego desplazó el objetivo a Ripa. Fulminante.

Una llamada de teléfono al para mí entonces desconocido Alcaraz, sirvió para hacer llegar a la AVT mi ofrecimiento de colaboración en Navarra. Algo en mí intuyó que me asomaba a una etapa embrollada, pero estaba lejos de saber que aquella primera conversación con mi hoy amigo Alcaraz iba a dar tanto de sí. Han sido una enormidad estos pocos larguísimos años. Han venido con más relleno del correspondiente a sus días. Se han sobrado. El caso es que el maldito proceso negociador con Eta nos trajo dolorosos desgarros en los movimientos cívicos y la AVT quedó casi sola frente al peligro. Los zapaterinos nos han perseguido por tierra, mar y aire. Algunas asociaciones de escasa representatividad, regidas por antiguos delegados de la AVT de la época en que la asociación quedó arrasada, han venido haciendo el papel de legitimadores de la negociación con los asesinos de los nuestros. La omisión ante la misma y el ataque continuado a la AVT y especialmente a Alcaraz, han sido los deleznables métodos. Oiga, a mí subvenciones y a lo demás que le den, parece ser su divisa. Pero lo demás, nuestra ciudadanía, la memoria, dignidad y justicia, eso que ellos displicentemente llaman política, es aquello que los terroristas quisieron destruir con tanta monstruosidad. ¿O es que nos los mataron sin querer y sin saber para qué? Motivos políticos totalitarios son el porqué. Así que en ese terreno me proclamo totalmente politizado, vaya que sí. De otro modo pensaría que soy un saco de arena, una panza.

¿Qué es eso de que las víctimas no debemos entrar en políticas, máxime cuando se negocia con los matones sobre cuestiones que son las que persiguen cuando nos matan? Váyase usted a la mierda. Y los partidos políticos harán lo que les parezca. A veces nos apoyarán, otras no y otras de aquella manera y en función de la coyuntura. Pero es cuestión suya. Qué aburrido es repetir esto durante años. Pero los medios de comunicación zapaterinos tienen mucha cañonería y tapan cualquier razonamiento. Además han contado con la inestimable colaboración de esas asociaciones que van dichas y el Portero de turno, inflamado de su enfermiza animadversión personal contra Alcaraz. Con tal de darle a la AVT y su Junta, daba igual ayudar a las picadoras mediáticas zapaterescas, incluso declarando a su favor en juzgados.

Bien, tras el proceso maldito, la AVT ahora ha tomado notoria distancia del anterior presidente. Además firmamos comunicados y nos fotografiamos con algunas personas honorables, sí que lo son, pero también con algunos de esos tipos que han colaborado en el trabajo de las picadoras mediáticas zapaterinas que nos han perseguido estos últimos años. Sobre todo al propio Alcaraz; incluso a su mujer. Es decir, validamos como compañeros de viaje a esos desvergonzados. Así, el mensaje que lanza la actual Junta, cualquier ciudadano avisado tiene derecho a descodificar de la siguiente manera: la junta de Alcaraz y el propio Alcaraz, malo. Los mamporreros de zapatero, bueno. Por tanto: la Rebelión Cívica error, malo. La negociaciación con Eta, bueno. Este es el único resultado; porque la reciente foto del actual presidente con motivo de la firma de un documento en compañías algunas -no todas, por supuesto- poco recomendables, no tiene otro resultado que el de la enmienda a la totalidad de nuestra lucha democrática de estos años y el aplauso a las picadoras zapateriles, que se ven ayudadas por ingenuos y por malvados.

Y todo para la Santísima Unidad de las Víctimas, esa milonga de la unidad por la unidad que es para que no pensemos. Unidad con mamporreros de ZP que nos han hecho la vida imposible y nos insultan, pero gélida distancia con la junta de Alcaraz. Oiga, la unidad esa... ¿me podrían explicar para qué sirve? Pues para que estemos domesticaditos, hombre. Como el valor supremo es la unidad por la unidad, en favor de ese valor excelso se sacrifican principios y lealtades debidas. Siempre llegarán las lisonjas de la administración y de los profesionales de esa constelación de fundaciones y colectivos diversos.

A otros efectos, esa fotografía es perfectamente inútil. Hombre, en Moncloa y en el 13 de la calle Génova, están contentos. Ahí sí que vale. Casquero, el día de su elección, aseguró la continuidad en la línea que la AVT venía manteniendo. Hombre, cada uno debe imprir su estilo a la gestión que le toca y puedes diferir en cuestiones accesorias, pero tamaña mentira se parece demasiado a una traición. Alguno me preguntará a qué viene titular "Libertad" esta entrada. Sencillo, hablo desde ahí.