En los minutos previos al comunicado etarra del sintagma mágico, cese definitivo, afirmaba yo en una tele que tras la conferencia de San Sebastián con mediadores internacionales al contado, estaban ZP y el apaño con la ETA. Uno de los contertulios se indignó con mi afirmación, mais voilà Egiguren: el presidente del PSE y negociador acaba de decir en la radio exactamente lo mismo. Y es que hace tiempo que se le tienen pilladas las trazas al vallisoletano de León, a pique de fichar como revisor de nubes. “No sabes, Sonso, la de españoles que podrían ser revisores de nubes”, dirá. Hace tiempo que tener que repetir estas cosas de la cosa cansa bastante. Que si el proceso es falsario en esencia, que si los mediadores no vienen sin el ok gubernamental, que igual que acordaron antes otros textos la declaración de Ayete también lo estaba... Y así desde que en 2005 muchos olíamos la mentira. A quienes una y otra vez no hemos callado, el tiempo nos da mayormente la razón, maldita sea. Rajoy asegura que no negociará. Al margen de esa loable expresión y según declara a los cuatro vientos el mismo presidente de los socialistas vascos, lo gordo ya estaría hecho con la banda, acordado su futuro. ¿Cómo gestionará Rajoy esa herencia? Desde 2008 se ha limitado a dejar hacer. La gaviota no se enteraba del secreto a voces: ZP y la banda seguían en proceso, como repetía Pepito Grillo Mayor, entre los populares casi la única voz denunciante de la pamema negociadora. En junio de 2008 Rajoy anunció un acuerdo en tema terrorista con ZP. Soy pertinaz con este asunto pero es que nos ocultan su contenido, tomándonos así por súbditos. Llamativa ocultación comparada con la publicidad del Pacto Antiterrorista de 2000.
Llevo años defendiendo que los apaños con la ETA, injustos e inmorales, minan gravemente el Estado de Derecho, con el efecto disolvente de la nación que ello supone. Creo que una suerte de frío, errado y no muy valeroso realismo por parte de Rajoy propició ese pacto de 2008, agravando con ocultación e indolencia esos daños a la nación. Además dudo que haya mejorado los resultados en las urnas, pues del naufragio electoral del PSOE de cuatro millones y pico de votos, su realismo ha recogido medio. Tal vez será buen presidente, eso quiero. Pero hereda un apaño con la banda gestado con no sé qué nivel de su aquiescencia en la segunda legislatura de ZP. En entrevista de longitud castrista en GARA, los asesinos deslizaron que el gobierno habría dado garantías de que el PP estaba al tanto de las conversaciones. Sí, pueden mentir los etarras. Ahora, Rajoy obvió el asunto. Concluirá el lector que no confío demasiado en lo que hará el popular en este terreno. No sé qué deparará el futuro y no le aventuro intenciones rechazables. Pero he vivido el pasado reciente y en esta cosa me he vuelto bastante tomasista. Y no por el torero, sino por el discípulo Tomás: ver para creer. Hace pocas fechas Zabaleta declaró que ARALAR añora refundirse con BATASUNA, organización terrorista, recuerdo. Vuelta a la casa del terror. Bien, ARALAR, integrante de AMAIUR, fue seguidamente recibida en la sede del PP vasco por Basagoiti, el hombre que habla titulares, para parlar de terrorismo con Zabaleta. Pa´ normalizar relaciones entre partidos, justificaron los populares. Decididamente San Gil no valía para según qué. Rajoy, Basagoiti y su política pop, tras recibir en su sede a ARALAR, ese trozo de AMAIUR, podrían sin mucho impedimento hacer lo mismo y con cafelito con el resto de la legal AMAIUR. Rufi, Pernando y tal. Todo de mucha risa. Eso sí, a riesgo de que los filoetarras les pidan cuentas por el ofensivo empeño de Miguel Ángel Blanco en impactar con su nuca contra las balas de Txapote.