Escapar

<b>Escapar</b>
El 27 de enero de 1979 tu sangre y la lluvia mojaron nuestra acera

22 diciembre 2008

Apague el tostón lotero y lea

Para día de sorteos, muy apropiado el artículo de ayer del amigo Emilio.

La lotería: el dinero es útil e importante. Diario de Navarra, 21.12.2008
EMILIO GARRIDO LANDÍVAR ES DOCTOR PSICÓLOGO
El dinero nos hace felices, no podemos negarlo, quien lo niegue no tiene un mínimo criterio social para ajustar sus niveles de calidad a lo que realmente es la vida personal y social. No nos gusta hablar de este tema porque nos sentimos incómodos, con cierto rubor, sobre todo si se habla en público o en círculos de amigos, de sociedades pequeñas. Como si reconocerlo nos produjera la incomodidad de aparentar no ser lo que nos han educado en nuestras familias y en nuestros entornos más bien franciscanos, mal orientados, porque la realidad real del dinero es la que se impone. El dinero es necesario, y útil; punto y final.

Nuestra tierra, que tiene dichos para cada cosa, suele decir que "de dinero y santidad, la mitad de la mitad". Por supuesto que sí, pero no deja de ser útil y necesario. Cuando alguien sale de la pobreza, de haberlo pasado "de a metro", de no haber tenido ni lo necesario, y se instaura en una cierta tranquilidad económica, su nivel de felicidad aumenta, y enferma menos, adquiere un nivel mayor de satisfacción vital. Esto es real y cierto. Luego el dinero nos hace felices en alguna medida. Las personas que vivimos con un cierto nivel económico, con el cual cubrimos nuestras necesidades primarias y nos da para alguna secundaria; vivimos sin estrecheces, controlando el gasto y siendo prudentes, pero con cierta tranquilidad económica; somos menos propensos "a coger" ciertas enfermedades infecciosas, tenemos mejor autoestima y esa paz y tranquilidad económica nos hace mucho más fuertes ante la vulnerabilidad al estrés.

Ahora viene la pega, grande y seria; cuando alguien tiene un nivel de dinero por un golpe de suerte, tanto de fortuna como de Lotería, el aumento de la felicidad no es proporcional al dinero que se tiene. Incluso se ha estudiado que personas que de la noche a la mañana, del 22 de diciembre al 23 del mismo mes, han adquirido un estatus económico con un volcán de millones; pasado el shock momentáneo de la confirmación de la realidad, se establece un parón estructural del propio cerebro. Hay muchas personas que no pueden encajar el estrés que produce semejante nivel de millones. ¡No es lo mismo pensarlo que ser uno el agraciado!

Supone tal conflicto interior con uno mismo en la estructura cognitiva y emocional, que se establece un bloqueo sin respuesta. Es y se puede llamar "un pseudoinfarto psicológico". Sí, ya sé que nuestros queridos lectores estarán diciéndose por dentro: "Que me toque a mí dicho "infarto, por muy psicológico que sea", y ya me espabilaré con ese porrón de dinero yendo al mejor profesional". El dinero a esos niveles, de repente, sin esperarlo, de improviso, por un golpe de suerte no da la felicidad, más bien quita la paz y la tranquilidad...; ofusca la conducta, ciega la conciencia, desestabiliza la emoción, y genera una sensación de malhumor e irritabilidad, con un fondo continuado de ansiedad... Algún autor ha llegado a decir que dependiendo del caudal adquirido y de la estructura personal o perfil psicológico de quien lo recibe, se presupone un verdadero estrés postraumático que permanece durante toda la vida, incluso en aquellos que ávidos de volver a estadios anteriores, malgastan los dineros o los invierten en nuevas adquisiciones....

La sabiduría popular suele decir, tras confirmar que no nos ha tocado la lotería del día veintidós: tenemos salud y eso es lo verdaderamente importante. Pero es verdad de la buena, salud para seguir en la brecha, trabajando con la misma ilusión de siempre y con el placer de estar vivos, de tener trabajo e incluso poder permitirse un capricho, después de haber cumplido con Hacienda. No es un mal objetivo, no lo crea, no se engañe, el dinero es necesario y útil, pero en su medida.

19 diciembre 2008

Navi... ¿qué?




Querido amigo, recibí la tarjeta con tu felicitación navideña. ¡Qué rara es, oye! Del montón de tarjetas que recibo en mi oficina remitidas por clientes, proveedores y alguna que llega por casa, hasta la fecha sólo tres se parecen a la tuya, tan bonita; con su familia de Belén. Así que, gracias a esas pocas extrañas tarjetas, alguien sigue diciendo que nuevamente celebramos el nacimiento del Niño Dios, con la esperanza de que nazca en cada uno de nosotros. Vamos, si no me equivoco.

Esta mañana he escuchado en la radio del coche un anuncio navideño muy interesante. Decía que se nos olvida el auténtico significado de la Navidad. Cierto, una verdad como un puño, he pensado. La voz del anuncio proseguía explicando que su auténtico significado es vivir con los nuestros experiencias únicas que no se nos olvidan nunca. El anunciante es un conocido parque de atracciones, ya sabes. Pa´ no echar gota chico. Feliz Navidad.

09 diciembre 2008

Los buenos. Diario de Navarra 10.12.2008

Me escribe mi amigo Alfredo confuso en relación a las noticias por el asesinato de Ignacio Uria. “Salva, ¿soy el único que piensa que hay otros sitios a los que señalar tras el atentado de Azpeitia que a una partida de tute en un bar? ¿Es que nadie ha escuchado a Arzalluz, ni visto lo ocurrido ayer en aquel ayuntamiento?” Alfredo tiene algo de razón. La foto de la lóbrega partida ha eclipsado un tanto algunos gruesos trazos de maldad del paisaje habitual, pero que tras un asesinato se hacen obscenamente visibles, como el primer brochazo negro en un lienzo. Arzalluz relegándonos al Valium a las víctimas y a quienes malviven acosados por las balas y las bombas de sus compañeros del Pacto de Estella. Que ni policía ni leches, que frente a Eta lo que hay que hacer es aguantar poniendo mala cara, ¡ala! Y ahora entiende uno un poco más el escaso bagaje de la Ertzantza en la lucha contra según qué. En lugar de ciudadanía, Arzalluz nos propone benzodiazepinas; sucesivas tomas de ansiolíticos hasta la consecución de esa ensoñación nacionalista que el viejo burukide comparte con los matones. Ahora comprenderá el lector por qué le interesamos narcotizados. Por cierto, no conozco noticias de que haya sido reconvenido por el PNV con acerbos reproches. Estará de acuerdo Erkoreka, digo.


No nos olvidemos de los sindicatos de la empresa del difunto; ELA condena el asesinato pero está presente en la plataforma anti TAV, suministradora de munición ideológica para lunáticos y malvados. De los batasunos de LAB, pa´ qué contar. Ese ayuntamiento gobernado por la etarra ANV más EA y Aralar, los integrantes del núcleo duro de la coalición Nafarroa Bai. Sí sí, recuerden; aquella simpática muchachada con la que había que conformar un gobierno ¡de progreso! para Navarra. Di que ahora EA y Aralar de Azpeitia se han caído del caballo y abjuran de su apoyo a ANV. Grandes dosis de cinismo adivino en su actitud. Con un muerto en el pueblo... qué quieren, ya les da como cosa gobernar con formaciones etarras. Debe ser algo así como estético, porque por razones éticas y políticas nunca debieran haber apoyado a ANV. Además dudan si apoyar una moción de censura para desalojarlos del ayuntamiento. Tales son la solidez y solvencia cívicas de este personal.

Siendo cierto esto que va dicho -y más-, ante la inquietud de mi amigo le he escrito que sin la partida de tute de Azpeitia no se entiende Eta. Que hacen bien los medios en incidir en ello. Que en realidad el tute ha permitido a Eta llegar hasta hoy. Esa partida, con los neutros comentarios de quienes allí concurrían, relatados por el periodista, resume muy bien el ambiente social que ha permitido a Eta oprimir hasta lo atroz tantas zonas del País Vasco y Navarra. ¡Ni una palabra condenatoria para los etarras que acababan de matar al compañero de mesa! Que si cantaba muy bien en Loyola, que si a pesar de su edad acudía diariamente a dar una vuelta por la oficina, que si... Hasta ahí. Sólo un parroquiano terció afirmando que ahora no se podrían fiar ni de sus propias familias. El silencio fue respuesta unánime. Si Ignacio Uria hubiera fallecido infartado, la dolencia cardíaca habría sido objeto de los denuestos que sus compañeros no dedicaron a los matarifes. Terrible.

Así que la foto de los jugadores de naipes es la clave de décadas de desistimiento, en el mejor de los casos. La pusilanimidad, la enferma indiferencia de los cómplices medrosos, sigue alimentando a la bestia. Muchos de ellos son personas educadas, aman a sus hijos y saludan al vecino de la escalera. “Buenos” que no riñen con nadie. Muchas víctimas los conocemos muy bien. Y es que la gente “buena” ha hecho mucho daño.