A este grupo de ciudadanos hay que añadir el segundo grupo de peligro. El de quienes niegan abiertamente la rehabilitación de las víctimas del terrorismo en el espacio público. Sostienen la cosa esta de que las víctimas no deben estar politizadas. Administrémosles medicinas y vendas y andando: víctimas objeto de piedad, pero no sujetos de derecho. Algunos de los practicantes de este pensamiento (?) defienden que las víctimas aprecian las ayudas y el dinerito; que lo demás les trae sin cuidado. Y hombre las habrá, empezando por las poquitas que pregonan con gusto crematístico esta indecencia desde sus chiringuitos. Pero hombre, que pretendan hacer pasar el cuidado de sus intereses materiales como modelo de conducta ciudadana a seguir me parece perverso. Total, que entre unos y otros las reducen a "víctimas heridos" sin mayor trascendencia política. Accidentados. Además se sostiene que sufren una suerte de disminución psicológica y social, un trauma insuperable, por el que su legitimación ciudadana representa un peligro para los designios de los partidos políticos, monopolistas de la actividad política, que para eso les votamos. En fin, la política democrática reducida al partidismo y legitimada sólo en los partidos. Gran cáncer. La política democrática reducida a la adición de papeletas. Política y partidismo confundidos en una sola cosa -vieja trampa mortal de la ciudadanía en nuestra democracia- y claro, así se entiende que muchos estén por la memez de la no politización de las víctimas.
En contra de lo que se desprende de la prédica tóxica de ambos especímenes, las víctimas del terrorismo lo son de un proyecto político totalitario. En el caso de la Eta la destrucción de la nación española. Además muchas de ellas, fueron perseguidas, asesinadas, mutiladas y heridas… con nombre y dos apellidos porque decidieron ejercer su derecho a expresar ideas políticas, decidieron ser libres y con ello defender la libertad de todos. Es decir, que plantaron cara a los matarifes. Por tanto las víctimas tienen todo el derecho a intervenir en la vida ciudadana y política. Y en estas andamos aún. A veces resulta bastante tedioso tener que explicarlo a cada paso. Y sí amigos, me da la gana de estar muy politizado. Por ello ando más libre, que mis trabajos me va costando. Hartos años me ocultaron.
En contra de lo que se desprende de la prédica tóxica de ambos especímenes, las víctimas del terrorismo lo son de un proyecto político totalitario. En el caso de la Eta la destrucción de la nación española. Además muchas de ellas, fueron perseguidas, asesinadas, mutiladas y heridas… con nombre y dos apellidos porque decidieron ejercer su derecho a expresar ideas políticas, decidieron ser libres y con ello defender la libertad de todos. Es decir, que plantaron cara a los matarifes. Por tanto las víctimas tienen todo el derecho a intervenir en la vida ciudadana y política. Y en estas andamos aún. A veces resulta bastante tedioso tener que explicarlo a cada paso. Y sí amigos, me da la gana de estar muy politizado. Por ello ando más libre, que mis trabajos me va costando. Hartos años me ocultaron.